El último jueves de este mes es la noche de Halloween. Como ya es tradición alrededor del mundo, los disfraces se verán por doquier y los niños recorrerán las calles, centros comerciales y parques de la ciudad en búsqueda de dulces y otros detalles. Aunque la diversión es parte esencial en esta festividad, tomar precauciones y saber cómo actuar en diferentes escenarios puede ser determinante para evitar incidentes.

Algunos consejos prácticos

Conserve los buenos hábitos:

• Se recomienda hacer una buena comida antes de salir de casa para evitar que el niño tenga mucha hambre y se vea motivado a consumir más dulces.
• Al regresar a casa haga un inventario de lo que los pequeños recibieron, revise que las envolturas estén bien cerradas y racione el consumo en los días siguientes.

La elección del disfraz:

• Verifique la calidad de la tela, que sea cómodo y, para evitar tropiezos, asegúrese de que no sea muy largo.
• Elija que este tenga algún elemento reflectante y colores vivos que sean fáciles de identificar.
• Si va a usar maquillaje cerciórese de que no sea tóxico y que además sea de fácil remoción. • Con los accesorios como espadas, martillos o bastones, trate de conseguirlos en formas redondas y evite los puntiagudos.

Antes de salir:

• Compruebe que tenga la documentación necesaria, tanto suya como la del menor: documento de identificación y carné de salud.
• Introduzca en los bolsillos del disfraz del pequeño una nota donde especifique su nombre y el número de teléfono del adulto a contactar en caso de alguna emergencia o extravío.
• Converse con el pequeño y explíquele cuál será el protocolo, a dónde irán y qué hacer en caso de que se pierda.

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Durante la celebración:

• Nunca pierda de vista al niño, procure organizar paseos en grupo con otros padres de familia y juntos acuerden cómo manejarán la seguridad de los pequeños.
• Al momento de transitar por calles recuerde usar los cruces peatonales, respetar los semáforos y no caminar por espacios con poca iluminación.